lunes, 23 de febrero de 2015

TE NECESITAMOS VIVO.


TE NECESITAMOS VIVO.

TOMADO DEL LIBRO 
“TÚ ERES LUZ…ENCIÉNDETE” DE OLGA NELLY GARCÍA 

Tú eres vida, aunque a veces te sientas medio muerto. Tus emociones descontroladas aniquilan la fuerza natural que posee tu sistema interno. Tu motor está apunto de desvielarse, Y no es porque el carro este correteado o porque sea chafa, sino porque no recibe un buen tratamiento, la atención necesaria o el cuidado preciso.

Estás más enamorado de las cosas materiales y del dinero que de tu cuerpo. A la larga, tu cuerpo va a hacerte más falta que el dinero. ¿Cuánto cuesta tu estómago?,¿Cuánto los 26 huesos de cada uno de tus pies? Si no tuvieras uno de ellos, no podrías sostenerte igual.¿en cuánto dejas tus pulgares? Tendrías que acostumbrarte a abotonarte sin ellos. ¿Qué precio tiene que tus músculos funcionen bien? Si no fuera así, no podrías llevarte el tenedor a la boca ni tomar el salero de la mesa y mucho menos sostener tu cabeza: la traerías agachada o de ladito. ¿Respiras solo? ¿Tus riñones limpian tu sangre?¿Tu vejiga sigue encargándose de tu orina o traes colgando una bolsita con sonda?

¡Ups! Cuántas cosas están jalando bien adentro de nosotros y ni cuenta nos habíamos dado. Te recuerdo que hay personas a quienes los riñones ya no les limpian la sangre. Ellos tienen que ir a sentarse junto a una máquina de diálisis que hace esa labor. Hay quienes no pueden tomar el salero de la mesa y tampoco pueden sostener su cabeza derechita porque tienen distrofia muscular, hay gente que ya no puede respirar sola y también otra que trae colgando una bolsita que atrapa la orina con una sonda porque su vejiga ya no jala bien. Pero eso no nos importa.
Hasta que algo empieza a fallarnos porque en ese momento dejan de ser importantes el caos, la crisis, la moda y los chismes. Empezamos a observar a nuestro cuerpo con angustia porque ya no está respondiéndonos, entonces daríamos lo que fuera por realizar nuestras actividades de siempre sin dificultad.

¿AMAS LAS TALLAS MÁS QUE A TU CUERPO?

Hemos ido habituándonos (sobre todo las mujeres) a odiar el cuerpo si no cabe en determinada talla. Lo vemos con recelo y casi indignación cuando en vez del 5 o 7, aparece 11 o 13 en la etiqueta del pantalón. Nos dirigimos al probador de la tienda cargando con nuestro cuerpo para hacerlo garras frente al espejo, mientras lo regañamos porque se ve fatal con la prenda que nos gustó. 

En el intento de entrar en la talla adecuada nos surge una especie de culpabilidad ignominiosa (ósea vergonzosa) porque acabamos de empacarnos, por séptima vez en la semana, una dotación irresistible de tacos de harina con barbacoa, frijolitos, chorizo con huevo y carne deshebrada, y concluimos el festín con un brownie de postre. Esto sin contar las ocasiones en que sucumbimos a la delicada tentación de ver películas, en el cine o en la casa, frente a un recipiente desbordante de palomitas un caramelo.

Entonces tu hermoso y fiel cuerpo te observa con mesura y parece hablarte cuando lo desprecias al verlo en el espejo” ¡pues ayúdame!", te dice. "¡Todavía no termino de digerir los tamales que te metiste la navidad pasada! Toma agua, por favor, échame la mano ¡no hay que ser! Escúchame cuando te digo que ya estamos llenos, no me recargues con más y más engrudo, pues lo único que me queda por hacer es almacenar todo ese excedente ¡dentro de ti!”

Y luego parece murmurar con sentimiento: "nomás te fijas en lo que no te gusta pero, y la digestión que hago, ¿esa no cuenta? y la renovación celular, ¿no te importa? es un trabajo que hago por ti celosamente y tú nomás te fijas en arrugas, lonjas y piel colgada. Y el que yo limpie tu sangre y tus arterias, a pesar de que me ayudes muy poco. ¿No lo valoras para nada? Dices que no te gustan tus piernas, pero ¿te sostienen?, no te gusta tu panza pero ¿jala?, ya no quieres cumplir años, entonces ¿detengo el corazón?"

"¡Ten dignidad!", parece gritarnos nuestro cuerpo, mientras nos pide no comprar porquerías para vernos más jóvenes, y en lugar de ello tratarlo bien para que vernos jóvenes suceda naturalmente, de acuerdo con el patrón divino que Dios diseñó para cada uno, para que, según sea la edad que tengas, florezca tu hermosura y todos admiren tu sabia juventud.

Casi creo escuchar la desesperación de tu cuerpo cuando grita: "¡Ya pélame, te necesito vivo! Deja de darle tanta importancia a lo que dicen las revistas de moda, es más importante que tú y yo estemos unidos, que me escuches. Cada persona es diferente, tú ya vienes con toda la instrucción necesaria para florecer de la mejor manera si te dejas de tarugadas". 

Eso y más nos grita nuestro cuerpo encabritado de tanto desprecio de nuestra parte, enojado sobre todo, por tanta indiferencia a su trabajo natural, preciso, inteligente, estratégico. Pero nosotros seguimos enchufados a pura superficialidad, a puros asuntos vanos e inútiles.

Me he dado cuenta que si lo amamos, el cuerpo colabora con nosotros. Si logras unirte a tu cuerpo, y decides tratarlo bien, nunca volverás a saber, por ejemplo, de un rebote causado por una dieta. Simplemente tu cuerpo responde fielmente cuando tu propósito es lograr la armonía y el equilibrio de la cabeza a los pies, no solamente mejoras estéticas.

Vuelve a ser amigo de tu cuerpo para que, con los años, se convierta en tu mejor aliado. 


viernes, 13 de febrero de 2015

CONCEPTOS ESENCIALES DEL LIBRO "ARMONÍA ESPIRITUAL"

CONCEPTOS ESENCIALES DEL LIBRO "ARMONÍA ESPIRITUAL" 
DE PILAR OBÓN







LA CASA DEL ALMA.
"Tu cuerpo es el reflejo del estado de tu alma."

Tu nivel y riqueza espiritual se muestran en tu materia, en tu exterior. Con sólo verte se puede saber si eres o no eres feliz, si estás conectado con tu divinidad, si has recibido ya o sigues ignorante del mensaje de amor universal del cosmos.
Tu cara tiene una expresión y ella te delata, todo tu ser te delata. Tus ojos, tus labios, tú frente, tu postura, tu voz y su tono. La paz y la felicidad son elementos indicativos de tu espiritualidad y no se pueden disimular como tampoco se pueden ocultar.

Tu cuerpo, que es tu envoltura material, refleja totalmente si has logrado la armonía, si te has convertido en su perfecta expresión o si no has logrado canalizar positivamente tu energía y no te hagas hermanado con tu entorno Y tus semejantes. Si te has limitado y si has avanzado.

Porque cuando no has tomado en cuenta tu vida interior, tu espiritualidad, tu expresión facial es de dureza, tu frente esta contraída, tus labios se desdibujan, tu voz es altisonante y tiene un tono de pesadumbre, de amargura. Tu cuerpo es como una hoja seca y contraída, que hace tiempo dejó escapar la vida.

Por el contrario, cuando has elevado tu frecuencia de pensamiento y sientes y vives en el amor, pareciera que tuvieras una luz interna que iluminara todo a tu paso, y lo que piensas y sientes, tanto por ti como por los demás, se advierte en tu mirada, brillante y directa. En la sonrisa que ofrecen tus labios, en tu postura y en la expresión serena y dulce que ha hecho nido en tu cara.

CONOCIMIENTO.

"Todo aquel que quiera una vida perfecta, debe buscar primero el conocimiento.”Srila Prabhupada

Todas las criaturas y las cosas en este mundo tienen una esencia, es decir, una razón de ser, misma que pertenece a un sitio, o a un grupo especial. Así, tanto seres vivos como inanimados forman reinos, grupos y especies diferentes. Además, entre todos esos grupos, hay de por medio una armonía, que los hace alternar, compaginarse, coexistir.
Desafortunadamente solo el ser humano no ha caído en la cuenta de esta cadena armónica y la razón es el desconocimiento de su propia esencia, de su naturaleza. El ser humano nace, vive y muere, en muchos casos, sin saber quién es, de dónde viene y para qué y por qué estuvo aquí.

Ese deseo de saber, de conocer, es también un despertar que nos impulsa a una búsqueda intensa, en la que esperamos afanosamente hallar respuestas para ese gran misterio del ser, que sólo nosotros podemos responder, porque en nuestro interior llevamos al gran Maestro Universal, quien nos habla desde dentro, para hacernos comprender nuestra trascendencia en este mundo.

ESPERANZA.
"Si ayudo a una persona a tener esperanza, no habré vivido en vano." Martín Luther King 

Esperar contra toda esperanza. Esperar sin desesperar. Esperar con inteligencia, con certeza, con serenidad. La esperanza para los seres humanos es la oportunidad para realizar algo que tal vez ya se consideraba perdido. Este sentimiento que se contiene también en la fe en que todo puede mejorar, es lo que hace que veamos una luz en la oscuridad. Es también un sentimiento de confianza que en un momento determinado, puede haber un milagro.
Esa fuerza interna que nos haces sobreponernos la adversidad, ese impulso que no sé hacer rebelarnos y enfrentar lo que sea, ese giro favorable e inesperado que pueden tomar las cosas, cuando se consideraban perdidas es la esperanza. Esa seguridad que nos susurra en el oído “sé fuerte y continua”, es la esperanza.

 FORTALEZA ESPIRITUAL.
"Nadie imagina que para enfrentarlo y superarlo todo, hacemos acopio de una enorme fortaleza, invisible e indestructible, que vive en el interior de cada quien."

Gente débil en apariencia que de pronto logra hacer proezas increíbles. Una sensación inaudita de calma ante una gran crisis emocional, ante la pérdida de un ser querido, ante el más negro de los problemas.
¿Cuantas veces has escuchado decir a alguien: "No sé de dónde saqué la fuerza para enfrentarme a esto"?
Esa fuerza que no sabías que existía dentro de ti es una prístina manifestación del espíritu, que en la peor de las tormentas se levanta y pelea. Dado que todos tenemos espíritu, todos tenemos también fortaleza espiritual. Y como cualquier don divino, es posible cultivarla: basta que sepas que existe, que eres más fuerte y resistente de lo que crees.

ORACIÓN.

"La oración es en un encuentro privado, entre Dios y tú.” Lorenzo de Palemón

Siempre musitamos "Dios mío", pero en realidad Él es de todos, porque a su misericordia nos encomendamos, porque cuando sufrimos en Él encontramos consuelo. Y cuando somos felices también Dios está presente, porque necesitamos hablar con Él y expresarle lo que sentimos, lo que anhelamos, lo que tememos, todo lo que pensamos. Todos confiamos en Él.

Una forma de sentirnos cerca de nuestra divinidad es elevar una oración, a solas, en un lugar donde haya tranquilidad, donde podamos analizar las palabras que le vamos a expresar. 

Porque es bien cierto que hay oraciones y plegarias que nos acompañan desde niños, a las que recurrimos cuando estamos asustados, cuando estamos emocionados. Cuando estamos lo mismo tristes que felices. Pero la verdadera oración nos la dicta nuestro corazón.

No hay mejor comunicación que la que es honesta y para dialogar cuando Él no necesitas de palabras sofisticadas ni elevadas. 

Bastará con que abras las puertas de tu corazón y le hables desde tu alma. Verás que te escucha, que te comprende, que te habla.

TRANSFORMACIÓN.
"Transformaos por la renovación de vuestras mentes." San Pablo.

Nuestra mente habla todo el tiempo, en una charla incesante. Es tanto su parloteo que a veces nos cansa, nos quita energía y, desde luego, tiene el poder de enfermarnos.
Todos los maestros espirituales conocen la importancia de acallar la mente. Cuando ésta se encuentra en silencio, podemos lograr la tranquilidad para abrirnos realmente al mundo, al plano espiritual, despertar nuestra conciencia y darnos cuenta de lo que es realmente importante.
Esto, es la transformación.